Muchos de nosotros aprendimos a jugar la carta indefensa en la infancia. Nuestros padres se apresuraron a salvarnos del desastre que creamos. Siempre buscábamos a nuestros padres para que nos salvasen nos sentíamos confiados que ellos iban a llegar al rescate. Quizás a lo mejor te encuentras en esa misma condición en estos momentos de tu vida, estas pidiendo que tus padres te ayuden en medio del problema que te encuentras.

Quiero que sepas que hay un Padre Celestial que ha mandado la ayuda que necesitamos, ha mandado a un Salvador para salvarnos. Mateo 18:11 Porque el Hijo del Hombre ha venido para salvar lo que se había perdido.

En algún momento, es necesario gestionar tus propios problemas y asumir la responsabilidad que necesitas ayuda no puedes continuar cometiendo los mismos errores que te llevan al fracaso, la incertidumbre, la decepción y mucho más.

Hoy día toma la decisión de pedirle la ayuda a Dios, todos la necesitamos. Hay una gran diferencia entre ser una criatura y un hijo de Dios, todo lo que nuestros ojos pueden contemplar ha sido creado por Dios. Pero para ser un hijo de Dios hay que recibir al Salvador que el mando y su nombre es Jesús. Cuando le recibimos en nuestros corazones la biblia dice que venimos a ser sus hijos de Dios no por voluntad de hombre, sino por la voluntad de Dios, ahora tenemos el derecho legal. Juan 1:12

Además la biblia nos dice que el que está en Cristo es una nueva criatura, que todas las cosas viejas pasaron he aquí todas son hechas nuevas. 2 Corintios 5:17

La ayuda que recibimos de nuestro Salvador se muestran en dos cosas importantes, la primera es que ahora tenemos una nueva vida, él nos ha dado una nueva identidad, una nueva naturaleza, una nueva posición ese súper héroe que está dentro de ti y segundo nos ha dado la oportunidad de comenzar de nuevo, no mirando el pasado sino el futuro que nos está esperando.

Los héroes pueden hacer las cosas, incluso si la ayuda es escasa. A un héroe no le importa si tiene que hacerlo todo de nuevo. Disfrutan la idea de asumir un gran desafío por sí mismos. Hace la victoria mucho más dulce.

Comienza hoy a descubrir el “Súper Pa” que Dios ha puesto dentro de ti, se el héroe de tus hijos, el ayudador de tu sociedad. ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? Romanos 8:31